-¿Preparada
Megan?
-Si doctora- digo
mientras los nervios me comen por dentro.
-Bien pues tumbare
en la camilla y coloca las piernas en los reposa-piernas -dice
señalando la típica camilla de ginecólogo.
Ya han pasado dos
semanas y estoy en los días de ovulacion así que la doctora llamada
Yanira quiere inseminar hoy y dice que hay un ochenta por ciento de
quedarme embarazada puesto que al ser joven tengo mas posibilidades
pero aun así ami me parece que esto no va a salir bien y lo malo es
que tendré que esperar al menos dos semanas para saber si estoy
embarazada y la verdad también estoy nerviosa puesto que estoy
esperando a quedarme embarazada para hablarles a mi familia sobre mi
cáncer ya que no se como se lo tomaran.
-Megan todo listo.
-¿Ya? Pero si han
sido dos minutos.
-Megan esto es
como si un chico se hubiese corrido, son segundos. -dice al punto de
reírse en mi cara al mismo tiempo que yo pienso que ese pelirrojo de
ojos verdes seguro que me hubiera dado mas que segundos- ya puedes
vestirte.
-¿Puedo hacer
vida normal? -digo mientras me pongo mi vestido negro ajustado y mis
zapatos de alto tacón de color rojo que van a conjunto de mi enorme
bolso donde solo llevo la cartera y un par de condones.
-Si solo que
tienes que dejar tu dieta vegana y empezar a comer de todo variado y
en cantidades razonables ya que vas a necesitar bastante fuerza y
nutrientes.
-¿Cuando tengo
que volver para saberlo?
-Pásate el día
catorce para unos análisis, tienes que venir en ayunas y el día
quince te espero a las diez empunto.
-Hasta el quince-
digo saliendo por la puerta y despidiéndome con mi mano.
Ya han pasado dos
semanas y estoy cogiéndome mi capuchino extra grande con sabor a
avellanas y casi no puedo moverme entre el monedero, los análisis y
el bolso y al final tengo que hacer malabares y terminar con el
monedero en la boca de camino a la sala de espera.
Oh mierda que se
me escurre el monedero ¡joder, joder! Intento cogerlo otra vez con
la boca mientras empujo con el brazo y siento que me arde la mano con
el maldito capuchino cuando de repente siento que me choco con
alguien y que mi capuchino ya no quema así que sorprendida levanto
la vista y me encuentro al tío mas guapo y sexy que e visto en mi
vida empapado hasta las orejas de mi capuchino y encima ¡ES MEDICO!
Lo que me faltaba. Suelto el monedero que cae directamente al suelo y
lo miro horrorizada y digo:
-Joder lo siento
no veía por donde iba, madre mía que estropicio e echo- lleva toda
la camisa, corbata y bata empapadas y yo aquí que se que en este
bolso llevo pañuelos pero soy incapaz de moverme ya que me esta
mirando con esos ojozos azul cielo mientras casi histérico se hecha
para atrás su precioso pelo negro.
Creo que pasan
como diez horas hasta que reacciono y saco los pañuelos del bolso e
intento arreglar el estropicio en su camisa cosa que es casi
imposible por no decir que esta para el cubo de la basura hasta que
paro y digo:
-Lo siento esta
inservible pero si quiere le pago otra nueva -mientras me agacho a
coger mi monedero- o le pago la tintorería como diga, por dios
perdone mi despiste de verdad.
-No se preocupe
señorita solo es una camisa mas de el armario -dice sonriendo
mientras se le forman dos preciosos ayuelos a cada lado de la cara.
-Pues permita que
le invitarle a un café, prometo no tirárselo por encima esta vez
-digo casi tartamudeando de lo nerviosa que me pone su mirada
impenetrable.
-Lo siento estoy
trabajando.
-Bueno pues cuando
acabe su turno. - o dios mio quiero seguir hablando con el así que
como rechace me da algo.
-De acuerdo, a las
seis y media en la cafetería que hay en la esquina, por cierto soy
Dylan y ¿usted?
- Soy Megan pero
deje lo de usted para los mayores que me hace sentir vieja -digo
mientras le estrecho la mano.- se que cafetería dice así que a las
seis y media estaré hay, ahora siento decirle que tengo prisa me
espera una consulta bastante interesante, adiós y perdone por la
camisa -digo alejándome lo mas rápido posible mientras las piernas
parece que se me convierten en gelatina.
Justo cuando llego
a la sala de espera dicen por megafonia mi nombre así que guardo el
monedero en el bolso, llamo a la puerta de la consulta y entro.
-Hola Megan ¿traes
los análisis? -dice mientras con la mano me ofrece la silla de
enfrente suya.
-Hola, aquí están
-digo entregándole la carpeta donde veo que tiene unas cuantas
manchas pequeñas de café y no puedo resistirme a esbozar una
sonrisa.
Me mantengo en
silencio mientras ella lee todas esas palabras en chino que pone en
los papeles, si, se que están en chino por que estaba tan nerviosa
que e intentado saber si estaba embarazada en cuanto me los han dado
pero me a resultado casi imposible saber nada.
-Pues Megan tengo
que felicitarte, estas embarazada y yo diría que por la cantidad de
hCG en sangre que tienes podrían ser hasta gemelos.
Continuara...
No hay comentarios:
Publicar un comentario